Los comienzos son siempre algo violento y ruidoso

Los comienzos son siempre algo violento y ruidoso. Siempre algo que termina, a veces bruscamente, para dejar lugar a lo nuevo. Pero tal vez es esto lo que los hace tan atractivos, tan embriagadores, tan regocijantes: los comienzos son potencial puro, algo que puede ser ilimitado, que puede ser todo.... o al menos esa es la impresión que da. La voluntad creadora es tan omnipotente en los comienzos....

Yo creo que es por eso que las religiones siempre comienzan por el principio: es en el acto creador donde se puede hacer creer que la deidad es omnipotente, ilimitada. Asi cualquiera. Es por eso que los comienzos tambien son una ilusion, un engaño llevado a cabo por su creador. Pero despues se nota enseguida la hilacha: alguien roba el fuego, alguien desobedece, o simplemente alguien se rebela y mata a su creador -para reemplazarlo- cuando ya todo esta hecho. Y todo se va a la mierda a partir de ahí, por supuesto.

La prueba indiscutible de finitud, de lo limitado que son los creadores son siempre los finales. Aunque se proclamen como nuevos comienzos, como la concrecion de lo eterno, como la voluntad divina, no hacen mas que mostrar que lo creado no podia existir eternamente. Siempre hay que hacer lugar para algo nuevo.

Los comienzos son siempre algo violento y ruidoso. Los comienzos aparentan eternidad y, por su propia naturaleza, no hacen mas que evidenciar su finitud. Aun asi, los comienzos siempre llaman: es la promesa de gloria, o la de satisfaccion, o simplemente la posibilidad de ser ominpotente por unos instantes.... no se cual de estas ilusiones es la mas tentadora. Pero algo es claro: ninguna otra accion es tan inutil y, a la vez, tan necesaria.

El OscurO
(Cuya Voz habla como una Multitud)

18/09/2007
11:03 p.m.